Adamo (Adamo Telecom Iberia S.A.U.) es un proveedor de servicios de telecomunicaciones con sede en Barcelona que ofrece conexiones de banda ancha ultrarrápidas a hogares y empresas en Cataluña, Madrid, Sevilla, Asturias, Cantabria, Galicia, Levante y Castilla. Si eres cliente de Adamo y necesitas darte de baja por cualquier motivo, aquí te explicamos cómo hacerlo.
Antes de comenzar, es importante tener en cuenta que, como la mayoría de las empresas de telecomunicaciones, Adamo tiene ciertos términos y condiciones que debes cumplir para darte de baja sin incurrir en cargos adicionales. Por lo tanto, se recomienda que revises tu contrato con la compañía para asegurarte de que estás dentro del plazo permitido y que entiendes los posibles costos asociados.
Una vez que hayas verificado que puedes darte de baja sin problemas, el siguiente paso es ponerse en contacto con Adamo. Puedes hacerlo de varias maneras:
- Llamando al teléfono gratuito 900 651 651 del servicio de atención al cliente de Adamo y solicitando la cancelación de tu servicio.
- Enviando un correo electrónico a bajas@adamo.es indicando tu intención de darte de baja.
- Darse de baja de Adamo a través del formulario de desistimiento, enviándolo a Adamo Telecom Iberia S.A.U. C/ Llacuna, 22, 1o 3a, 08005 Barcelona, España.
En cualquiera de estos casos, es importante que proporciones la información necesaria para identificar tu cuenta, como tu número de cliente, tu nombre completo y la dirección asociada con tu cuenta. También debes indicar claramente que deseas cancelar el servicio.
Una vez que hayas proporcionado la información necesaria y hayas indicado tu deseo de cancelar el servicio, es posible que el servicio de atención al cliente de Adamo intente persuadirte para que te quedes como cliente ofreciéndote ofertas o descuentos. Si estás seguro de que quieres cancelar el servicio, asegúrate de ser claro y firme en tu decisión.
Una vez que se haya confirmado la cancelación de tu servicio, es posible que debas devolver cualquier equipo de Adamo, como un router o un decodificador de TV, si se te proporcionaron como parte del contrato. En algunos casos, también es posible que debas pagar una tarifa de cancelación o gastos administrativos asociados con la cancelación.